lunes, 24 de enero de 2011

1

¿En realidad somos muy torpes?

¿Cómo es que a pesar de que cumplimos años la mayoría de las veces no dejamos de hacer el ridiculo?
Aun no me lo explico, se supone que cuando una persona va creciendo (y no me refiero a la edad o estatura) tambien desarrolla el tan llamado "sentido común", al parecer esa regla no es para mi o para mi primo René (Jr.), ambos hemos tenido nuestros encuentros con la demencia seguido o simplemente somos muy torpes. Llevo un par de dias pensando en los inicidentes que he tenido por andar como la abeja maya; en un país multicolor, y tambien me di cuenta que se lleva en la sangre, mi queridisimo primo me lo demostró hace poco con su anecdota.

Antes de salir de vacaciones, como siempre platicabamos los cuatro. Y René se acercó muy entusiasta y me dijo que casi se quemaba vivo y tambien la casa; al principio nadie le creyó, como no iba a saber lo que puede causar un incencio; bueno, antes no, ahora ya esta muy familiarizado con eso.  En fin, dice que era un dia que tenian el calentón prendido y casi casi estaba encima de el, (yo pensé "primo no te acerques demasiado, que estas muy delgado y te vas a derretir"), aun así continuó muy cerca para calentarse, pero tambien se le ocurrió rociarle perfume, al parecer el calentón no desprendia el olor que el deseaba y que mejor que sea del perfume que uno usa, ¿no? Se acercó aun mas y le comenzó a  arrojar el perfume, cuando ese tipo de cosas pasan o se piensan ya sa sabe cual va a ser el resultado... mi primo no; tan rápido empezaron las llamas, René tomó la toalla más cercana y trato de apagarlo, intento fallido, también se incendió y de alguna manera logró extinguir la toalla y el calentón. Después del susto que se dió fue y se sentó en una cama y comenzó a reirse solo.
Al menos este estaba solo en casa, asi se puede emplear la frase de no dejar al alcance de los niños o no dejar a los niños solos en casa.

Como dije, tambien yo he hecho cada tonteria. No es algo de lo que me sienta muy orgullosa pero cuando se recuerdan si te ries.

Una ocasión que Diana y yo no olvidamos fue cuando tuvimos que ir a la tienda que esta cruzando la calle, la señora que atiende es muy cascarrabias de un tiempo hacia acá, al momento de que nosotras entramos, ella y su hijo mayor estaban discutiendo sobre porque a el no le habian comprado pantalones y a sus dos hermanos si. Mientras ellos terminaban su platica de madre e hijo nosotras nos fuimos al otro lado de la tienda para darles un poco de privacidad, a pesar de no estar poniendo tanta atención se me quedó grabado ¿porque no le compró también a el pantalones? como si no hubiera sido sufucientemente vergonzoso para la señora, mi subconciente decidio jugarme una artimaña muy mala, se supone que estabamos alli para comprar limones pero al momento de que tenia que preguntarle ¿Si tiene limones? fue algo mas bien como: ¿Si tiene pantalones?
En seguida el ambiente se tornó más hostil y al momento de verle la cara de rabia me di cuenta del error que habia cometido e hice la pregunta como debía de ser, ella respondió que no. salimos de la tienda y no sabíamos que reacción debiamos de tener, al final nos reímos tanto y todavía es la hora en que nos acordamos de eso y nos reímos.
Esa no ha sido la única vez que he hecho una pregunta mal, lo bueno es que no fue en esa misma tienda, ya me imagino despues nos pondría un cartel con las palabras "nos reservamos derecho de admisión" especialmente para nosotras. La segunda vez, fuimos a una tienda que está mas atrás y mientras esperabamos a que viniera alguien a atendernos yo le decia algo a Diana que involucraba dinero, pero en medio de la platica llegó la señora y le pregunté ¿si tiene dinero? si mal no recuerdo creo que buscabamos aguacates, claro que esta señora es más agradable que la primera y se rió con nosotras, aunque tampoco tenia lo que buscabamos, son mas las vergüenzas que hago pasar que lo que logro comprar.

Una personita más me demostró que no solo a nosotros nos pasan cosas vergonzosas.
Karla, esta conmigo en la preparatoria y me contó que  una vez fue casa de su abuelita, en un momento de locura se quitó el sueter, pero no uno cualquiera, sino su favorito. Lo dejó encima de un boiler y no se dió cuenta que estaba prendido. No se dió cuenta de lo que pasaba hasta que vió alrededor a varios familiares, y entonces supo que algo se incendiaba... ese algo era su sueter. Al parecer ya no lo pudieron rescatar a tiempo, pobre Karla; lloró.

Quiero pensar que todavia hay esperanza para nosotros.

lunes, 17 de enero de 2011

1

La Primera Entrada

Jamas habia tenido un blog, aunque si hay quienes tienen uno en mi familia. No soy muy dada a tener o mas bien publicar algo que yo misma escribí. A pesar de tener 16 años (recién cumplidos debo añadir) no me es relevante ingresar todos los dias al facebook, msn, yahoo, metroflog, etc. No me llaman tanto la atencion todos esas cosas porque no soy muy buena; me cuesta trabajo poner atención en lo que debo de hacer.

En fin, me animé a tener un blog porque mi mamá y un par de primas ya tienen uno,yo no me quería quedar atrás. Aunque ultimamente ninguna de las tres ha escrito nada, aunque me extraña de mi mamá, en sus columnas siempre escribe sobre nosotras y  bastante, claro, es muy obvio siendo una veterana de la lectura, la mayoria de sus escritos son muy agradables y a veces hasta graciosos, pero hay sus excepciones como cuando escribe de futbol. Y cuando nadie escribe nada si me aburro un poco, también por eso quise hacerlo, asi ya no tendré que estar impaciente por que no han
escrito nada, ahora yo escribiré de tanta tonteria se me ocurra o que me pase.

Solo espero poder tener el tiempo de escribir seguido y de cosas que  les guste.
Me despido y trataré de escribir pronto.